Entre la gran variedad de técnicas de masaje que en la actualidad oferta el mundo del spa, se encuentran los efectuados con conchas y caracoles los cuales pueden ser calientes o fríos. Esta técnica no sólo nos ayuda a relajarnos; equilibra nuestra energía ya que los caracoles transforman la energía negativa en positiva, además que armoniza los 5 sentidos, sin dejar de mencionar su uso en el drenaje linfático por su gran efecto desintoxicante. Esta terapia se puede aplicar en terapias faciales, estéticas, corporales.
Beneficios: Relajación muscular. Disminución de contracturas.
El efecto relajante muscular se produce gracias a las fricciones suaves, largas y envolventes que se realizan con las caracolas. Tiene un efecto sedante sobre el sistema nervioso, debido a las presiones descompresiones producidas sobre el cuerpo del receptor y a los movimientos suaves y precisos con las conchas y caracolas.